Círculo Dulce Whole Kitchen: Cupcakes invertidos de piña

Saludos desde Inglaterra!!

Aquí la persona más feliz del mundo :) Ayer por la tarde llegué a Inglaterra... ¡había Mince Pies recién hechos en el horno! Y esa taza de té calentita... ¡¡Felicidad total!!



¡¡¡¡Pero mi momento de felicidad no ha acabado ahí, porque al encender el ordenador esta mañana he visto que el blog ya tiene más de 100 seguidores/as!!!! ¡¡Estoy emocionada!! Voy a pensar alguna forma para celebrarlo y que todos podáis ser parte de la celebración... Ya os contaré, ya...



Pero vayamos a lo que importa...

La razón por la que estoy blogueando desde Radlett (Hertfordshire), es que ya es 25 de noviembre y, por tanto, es el momento de haceros llegar mi versión de la propuesta del Círculo Dulce de Whole kitchen:

Whole Kitchen en su Propuesta Dulce para el mes de Noviembre nos invita a preparar un Pastel Invertido.

Por el título de mi entrada y las fotos ya os podéis imaginar lo que he hecho… ¡¡la versión cupcake!!

Es que las tartas tamaño normal me asustan todavía, de verdad! jaja.


Mi versión de la receta, inspirada en la que nos proponían las chicas de Whole Kitchen, pero hecha “a mi manera” y con las medidas para 8 cupcakes es la siguiente:

Ingredientes para el bizcocho:

• 100 gr harina
• 100 gr azúcar
• 2 huevos
• 100 gr mantequilla
• 3/4 cucharadita levadura Royal
• 1 sobre azúcar de vainilla

Ingredientes para la parte de abajo del pastel (que luego resulta ser la de arriba):

• Piña en su jugo (o cerezas, mandarina, melocotón… las posibilidades son infinitas!!!)
• 2 cucharadas azúcar moreno
• 2 cucharadas azúcar normal
• 1 cucharada mantequilla

Instrucciones:

- Precalentamos el horno a 180ºC.

- Con nuestra batidora, mezclamos todos los ingredientes del bizcocho. Lo dejamos en reposo mientras preparamos el caramelo.

- Ponemos en un cazo dos cucharadas de azúcar moreno, dos cucharadas de azúcar normal y 1 cucharada de mantequilla. Lo calentamos hasta que se derritan y entonces lo echamos en el molde para muffins/cupcakes (que previamente habremos engrasado con mantequilla).


- Una vez hemos cubierto la base de los moldes con el caramelo, ponemos encima los trozos de piña (y, en mi caso, una cereza de esas alemanas de las que estoy enamorada).


- A continuación repartimos la masa del bizcocho en los moldes, con cuidado, llenándolos hasta 3/4 de su capacidad.

- Finalmente, los metemos en el horno durante 18-22 minutos.


- Antes de desmoldarlos, esperamos unos 10 minutos. Luego les damos la vuelta (mientras rezamos porque no se hayan pegado al molde…) jaja.



El resultado es ESPECTACULAR.





He de decir que yo y la piña de bote no somos muy buenas amigas (donde esté una piña natural, que se quiten los botes…), pero en este caso la verdad es que me supieron los pastelitos a gloria… (sí… confesión… me comí dos recién salidos del horno!!! es que cómo están!!!)





Hasta pronto!!!!