lunes, 18 de enero de 2016

Tarta de rosas (y un súper concurso de San Valentín)



Recuerdo aquél día de 2011 cuando descubrí la decoración de tartas con rosas de buttercream.

Estaba en Alemania, hacía muy mal tiempo y dedicaba gran parte de mi tiempo a investigar... ¡y no precisamente en mi tesis doctoral! Realmente estaba enganchada a los blogs americanos de repostería, y no había día que no consultara mis favoritos: Joy the baker, Iambaker, Bakingdom...

Y un día vi una tarta de rosas en el blog de Iambaker que me dejó sin palabras. Nos sé si la inventó ella, pero sin duda fue la primera en llevar esa técnica a cabo para plasmarla en un blog. Pasé semanas soñando con esa tarta. Me iba a dormir y soñaba con hacerla. Estaba totalmente obsesionada.


En marzo, justo un mes después de que Amanda publicara su tutorial, hice yo mi primera tarta de rosas. Allí, en Alemania, sin casi materiales y con una técnica de lo más rústica, pero con ganas locas de poder tener mi propia tarta de rosas, preparé una tarta similar. Creo que esa tarta fue una de las claves para que decidiera dejarlo todo y dedicarme a la repostería. Nunca hasta entonces me había obsesionado así con nada, y fue en esos meses cuando la repostería pasó a ser mi pasión.

Desde entonces he hecho muchas tartas de rosas para múltiples ocasiones, aunque no las he subido al blog, y esta mañana, pensando en que se acercaba San Valentín, me he dicho que debía hacer honor a aquella tarta que tantísimo significó para mí.


En este caso la he hecho con mi bizcocho favorito de chocolate negro, la he rellenado de mermelada de frambuesas y la cobertura es una crema de merengue suizo de vainilla. Vaya, que no tiene desperdicio.

Pero antes de ir con la receta, os quiero anunciar que Hipercor ha lanzado un Concurso de recetas por San Valentín súper chulo. ¡A mí me han elegido como jurado junto a Belén Otero de "Cocinar para 2" y a Pamela Rodríguez de "Uno de dos"! ¡¡Qué honor!!

Para participar sólo tienes que elaborar una receta dulce o salada especial para San Valentín. La receta puede enviarse con o sin fotografía, aunque nos encantará ver el resultado final del plato para poder valorar mejor la receta.

Puedes participar hasta el día 7 de febrero a las 23:59 horas. Debes registrarte en la web de Hipercor y subir tu receta mediante un sencillo formulario.

El premio son tres cheques regalo por valor de 100 euros, uno para cada uno de los tres ganadores que se seleccionarán.

¡¡Haz click en la imagen para participar!!


Y ahora sí, vamos con la receta.

TARTA DE ROSAS
Receta de Alma Obregón

Para 3 moldes de 15 cms de diámetro

• 80ml aceite de oliva suave
• 250g azúcar
• 150g harina
• 50gr de cacao
• 2 cucharaditas de levadura química
• 2 huevos M
• 75ml de nata 35%mg
• 1 cucharadita de extracto de vainilla
• 150ml de agua hirviendo

Precalentamos el horno a 180º. Engrasamos y enharinamos los moldes o los rociamos con spray desmoldante.

En un bol, tamizamos harina, cacao y levadura química. Reservamos. Batimos aceite, azúcar y huevos hasta que están bien integrados. Incorporamos la mezcla de harina y cacao.

Una vez la mezcla sea homogénea, incorporamos la nata y batimos de nuevo. Finalmente incorporamos el agua, hirviendo. Batimos de nuevo.

Pesamos la masa y la repartimos equitativamente entre los moldes.

Horneamos 25-30 minutos o hasta que los bordes del bizcocho se separen ligeramente del molde y al introducir un palillo salga limpio.

Desmoldamos cuando el molde esté templado al tacto y dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.

Preparamos la crema:

• 4 claras
• 220g azúcar
• 350g mantequilla a temperatura ambiente (Yo uso Kerrygold)
• 2 cucharaditas de vainilla en pasta
• Colorante rosa en pasta

Mezclamos las claras y el azúcar y calentamos la mezcla al baño maría hasta que el azúcar se disuelva por completo. Pasamos la mezcla al bol de la batidora y montamos a punto de nieve hasta tener un merengue bien firme.

Incorporamos la mantequilla poco a poco, sin dejar de batir. Al principio parecerá que la crema se corta, pero si sigues batiendo pronto se pondrá súper sedosa. Añadimos la vainilla en pasta y el colorante.

En primer lugar, usamos una boquilla del 5, redonda, para hacer un borde en nuestros bizcochos y colocar el relleno de mermelada de frambuesa:


Después, cubrimos toda la tarta con una fina capa de crema, que servirá para sujetar las migas. Es importante que sea muy fina. Refrigeraremos la tarta durante, al menos, media hora.


Una vez fría, ya sólo tenemos que colocar la boquilla 1M de Wilton en nuestra manga pastelera y decorar la tarta entera realizando rosetones, empezando siempre desde el centro del rosetón hacia fuera (si os queréis reír un rato, aquí tenéis un tutorial también de mis comienzos). 

Para que os sea más fácil decorar, empezad siempre por las rosas de la base de la tarta para después hacer las superiores. Así no se caerán.


Espero que la preparéis y que os proporcione tanta satisfacción como a mí me produjo en su día.

Os deseo un inicio de semana maravilloso.

 Besos a porrón,

Alma




lunes, 4 de enero de 2016

Springerle


¿Qué tal van esas fiestas navideñas?

Nosotros hoy y mañana trabajamos, pero a última hora cogemos el coche y subimos a los Pirineos... ¡¡al fin!! ¡¡¡a la nieve!!!

Bueno. Realmente de momento creo que nieve haber no hay mucha, pero vaya, que se supone que va a nevar. 

Me preocupa un poco el hecho de irnos justo mañana por la noche a Jaca, claro, no vaya a ser que los Reyes Magos se hagan un lío y al no encontrarnos en casa nos dejen sin regalos.

Yo por si acaso dejaré a Minion encargado de abrirles la puerta. ¡Crucemos los dedos porque no la abra y se escape él!


Hoy os traigo una de esas recetas que son amor total y que son sorprendentemente fáciles. Eso sí, paciencia, que hay que hacerlas ¡¡¡un día antes de hornearlas!!!

Lo digo por si se las queréis hacer a los Reyes Magos... ¡¡¡Tenéis que empezar ya!!!

Las springerle son un tipo de galletas de anís, típicas de la Navidad en Alemania, Austria, Suiza y Hungría que se caracterizan por realizarse presionando la masa en moldes súper detallados de madera (podéis comprarlos aquí).

Si habéis estado en los mercadillos de Navidad las habréis visto, ¡sí o sí!


En su versión original, se preparan con bicarbonato de amonio. Si queréis hacer la receta clásica, tenéis que mezclar 1/2 cucharadita de bicarbonato de amonio con 1 cucharada sopera de leche y dejarlo reposar en torno a una hora y media antes de añadirla al resto de ingredientes. Podéis comprar el bicarbonato de amonio aquí

Para no complicaros, yo las he preparado siguiendo la receta de Patricia Arribálzaga, que aparece en su libro Cupcakes, Cookies & Macarons de Alta Costura, y que las prepara con levadura química.


SPRINGERLE
(Receta de Patricia Arribálzaga, libro Cupcakes, Cookies & Macarons de Alta Costura)

Ingredientes
  • 3 huevos 
  • 375g de azúcar glas
  • 60g de mantequilla a temperatura ambiente (yo uso Kerrygold)
  • ¼ cucharadita de sal
  • ½ cucharadita de levadura en polvo 
  • 500 gramos de harina
  • ½ cucharadita de aceite esencial de anís (yo usé anís en polvo pero también podéis usar aroma de anís)

Batimos los huevos en torno a 15 minutos con una batidora de varillas, hasta que tengan un color muy claro. Esto es importante para que las galletas luego tengan un color casi blanco.

Una vez se hayan aclarado, incorporar el azúcar glas, tamizado, y seguidamente la mantequilla y el anís. (Si estamos usando bicarbonato de amonio en lugar de levadura, lo incorporamos ahora). Cuando la masa sea homogénea, incorporamos la harina, tamizada con la levadura y la sal. 

Amasamos un par de minutos a velocidad mínima (a mano o con la batidora) hasta tener una masa homogénea. A continuación, sobre una superficie enharinada amasamos un poco más, y cuando no se pegue a las manos la estiramos con un rodillo bastante gordita (1,5 a 2 cms).

Pincelamos los moldes con harina (¡¡¡súper importante!!!) y apretamos con fuerza para dejar su marca en la masa. Levantamos el molde con cuidado para que no se nos pegue la masa y cortamos el borde de la galleta con un cuchillo o un cortador del mismo tamaño. Con una espátula, vamos pasando las galletas a una bandeja cubierta con papel de horno.

Dejamos reposar las galletas al menos toda la noche al aire (entre 8 y 24 horas). Se "secarán".

Horneamos a 150º entre 10 y 15 minutos, sin que se doren (ya que perderían su color blanco).

Una vez horneadas las dejamos enfriar por completo y después las almacenamos en una lata de galletas. Su sabor es mucho mejor al de 3 - 4 semanas que además estarán más blanditas.



Sinceramente, da pena comérselas. De hecho, yo sólo me comí una que me quedó mal el borde. Las demás las he regalado. Son taaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaan bonitas!!!!

Un beso enorme y que los Reyes Magos os traigan un montón de cosas!

Alma