¡¡Ya soy doblemente maratoniana!! Maratón Divina Pastora Valencia

¡Gracias a Luis de ViniloFM por el fotón!

Hoy no traigo receta...

Espero que me perdonéis...

Pero es que me muero por contaros que ayer corrí el Maratón de Valencia, mi segundo maratón, y que bajé mi marca en 17 minutos.

Fueron 3 horas y 38 minutos emocionantes y, a la vez, de sufrimiento (a partir del kilómetro 33 sobre todo, que yo corría y corría y los kms no parecían pasar nunca).

Eso sí, sin duda mereció la pena al 100% correr todos y cada uno de esos 42195 metros.

El fin de semana comenzó en Atocha, muy temprano, donde acompañada por mis padres, Alberto y Javier cogí el ave a Valencia. 

Tres Drinking Runners con una misión: terminar el maratón y así sumar más kilómetros por alimentos. 

Nada más llegar nos pasó algo alucinante en la estación... ¡¡¡¡Nos encontramos con Chema Martínez!!!! Sí!!!! Tantas veces leyendo las crónicas de sus carreras, viéndole en videos, leyendo sus libros... ¡¡y estaba allí!!

Fue TAN simpático!!!! Increíble!!!!!!!! 

Chema, si lees esto algún día, que sepas que tus palabras me dieron ánimos en los últimos kilómetros del maratón cuando ya no podía más!!!!!

Tras dejar las cosas en el hotel fuimos a recoger el dorsal. 

¡¡Cómo mola Valencia!!

El dia pasó poco a poco.

Comimos pasta, fuimos a dar una vuelta por el centro y vimos algunas tiendas...

Los nervios estaban cada vez más presentes!!!

Y finalmente llegó el día de ayer.

Gracias a Dios la predicción de lluvia no se cumplió y el cielo estaba despejado, anunciando un sol radiante, cuando llegamos a la Ciudad de las Artes y las Ciencias, donde estaba la salida y la meta del maratón.

Incapaces de encontrar a Javier por ninguna parte nos fuimos al cajón de salida, sabiendo que mis padres estaban absolutamente preparados para animarnos.

¡¡La suerte estaba echada!!

A partir de ahí el resto fue correr.

Durante esas 3 horas y 38 minutos tuve mucho en qué pensar.

Pensé en mi primera carrera, la de la mujer, en 2010. ¿Quién me hubiera dicho entonces que sólo 3 años más tarde iba a completar dos maratones?

Pensé en lo agradecida que estoy a mis padres, por apoyarme incluso en estas locuras. Gracias papi y mami, siempre me habéis apoyado en todo y sin vosotros nada sería posible. Veros animándome me emocionó muchísimo, cuando os ví en el km 41 se me saltaban las lágrimas!

Pensé en todas las personas que han ayudado a que yo completara ese maratón.

Pensé en Iván, mi entrenador, sin el que jamás hubiera podido conseguir acabar un maratón, y ni siquiera digamos bajar mi marca!! Gracias Iván por estar ahí de nuevo, una vez más.

Pensé en mi lesión de rodilla de hace un par de meses de la que jamás hubiera podido salir sin la ayuda de Alberto, de Fisiosport Madrid.

Pensé en los Drinking Runners y en el día que conocí a su fundador, Pablo Carmenado, en la Feria del Libro. Pensé en las risas, en los entrenamientos y, sobre todo, en las horas whatsappeando tonterías relacionadas (o no) con el running.

Pensé en tod@s l@s que me habéis apoyado desde el blog, desde facebook, desde twitter... ¡¡Vuestros ánimos me dieron fuerzas!! (JaviSC, que sepas que tus palabras "si aparece el hombre del mazo tírale un cupcake" retumbaron con fuerza en mis oídos en los kms 33 a 36!! jaja)

Y cómo no, pensé en todas aquellas personas que estaban animando en carrera.

Fueron tantos los "vamos Alma!!!" que me sentí flotar durante muchos kilómetros!!! Gracias gracias gracias!!! A todas aquellas personas que nos animaron durante el maratón, a todas, gracias.

A todos los niños y niñas que sacaban la mano para que "chocáramos esos cinco" al pasar. Gracias.

Por esos momentos corro. Esa es la razón. Vuestra presencia es lo que me hace querer correr y correr sin parar.

Y llegué. 

Entré en meta casi llorando, emocionada por el esfuerzo. Fue ver a mis padres en el km 41 y no podía aguantar más las lágrimas. Me dolía todo el cuerpo pero sabía que estaba bajando mi marca muchísimo y tenía que seguir.

No sé. Supongo que en esas 3h38 también pensé en todas aquellas veces que me han dicho "no puedes" y que he demostrado que "sí puedo"... que "sí, podemos".

Podemos hacer aquello que nos planteemos, cumplir aquello que soñamos... 

Nunca dejéis que nadie os diga que "no podéis."

Creo que jamás podré olvidar este fin de semana.

Os quiero!

Alma