De amores culinarios y otras locuras...

Estoy enamorada de Nigella Lawson.

Sí, la amo, aunque sea culinariamente hablando.

¿No amaríais culinariamente a alguien cuya receta es aparentemente esto...


... pero realmente esto???

Lo sé.

Ahora también vosotros la amáis.

En otras ocasiones os he hablado de mi (reciente pero intensa) obsesión por Nigella... pero es que ayer mi fijación por sus recetas se incrementó en un 1000% cuando me decidí a hacer sus Chocopots. La receta está en este video de Youtube. Yo la he adaptado en gramos.

• Precalentar el horno a 200º y enmantequillar cuatro ramekins.
• Derretir 180 gramos de chocolate negro con 125 gramos de mantequilla al baño maría. Cuando esté bien derretido, dejar templar.
• Batir 2 huevos con 150g de azúcar (ella pone un poco más de azúcar pero yo puse 150g) y 3 cucharadas de harina.
• Añadir esta mezcla al chocolate derretido.
• Rellenar los ramekins, no más de 2/3.
• Hornear en torno a 15-18 minutos.
• Servir caliente.

Alucinantes, ¿no? Y más fáciles imposible.

Y aquí no acaba esta entrada...


Dejadme que después de un dulce, os presente una idea para dejar a vuestros invitados boquiabiertos en menos de 5 minutos.


Se trata de unos bocaditos de bonito del norte con pimiento asado. Los hice para mis padres y Andrew, aprovechando que Conservas Serrats me ha dado la oportunidad de probar sus productos. Creo que ya os he contado lo caro (y malo) que está el pescado en Frankfurt.... así que os podéis imaginar mi felicidad suprema cuando me ví con una pequeña selección de sus productos, incluído este bote de bonito del norte en aceite de oliva.

Pues bien, a parte de comerme con un tenedor una buena cantidad directamente del bote (placer de dioses), decidí usar las cucharas de aperitivos tan bonitas que me había comprado mi madre esa mañana.

Más fácil, imposible: necesitáis un bote pimientos rojos asados en aceite (o mejor aún, unos pimientos asados caseros, rehogados con aceite y ajo tras asarlos), bonito del norte en aceite de oliva y perejil natural. Además, necesitáis unas cucharadas de aperitivo o unos platitos chiquititos.
Y ya está. Sólo tenéis que poner un triángulo de pimiento asado cubierto por un trocito de bonito y adornado con perejil natural. No es necesario añadir aceite, pues los pimientos asados y el bonito ya lo llevan. Ñam!!


Estos aperitivos fueron sólo uno de los geniales momentos que compartí con mis padres durante el fin de semana. ¡¡¡Gracias Papi y Mami por venir!!! Lo pasamos de maravilla. Y sí. Les hice cupcakes... ¡¡¡y una tarta con fondant!!!

Pero eso, os lo contaré muy pronto... Sé que mi entrada programada se fue de la lengua y os avisó de que el tutorial de la tarta estaba al caer... (¡¡le voy a tener que echar la bronca!!) así que no os puedo engañar. Esta semana, tutorial de tarta recubierta con ganaché de chocolate y fondant, paso a paso!!

Nos os aburro más. Besos a porrón,

Alma